Pues ya estoy más o menos instalada, por fin.
Desde luego, ya parece un hogar totalmente: el edredón y la almohada NORMAL (por supuesto, con una sábana por encima pa que no se le pegue el olor de la comida), todo el cuarto lleno de maletas a medio deshacer, el ruido del compresor de la nevera (bendito sea!!!), una mesita de noche con puerta con cadenita y un revistero con unos azulejos monísimos (ambos de la calle, vamos, de anticuario) y la cafetera italiana para la droga de por las mañanas.
Y lo mejor: cambio de residencia, pero algunas cosas nunca cambian. Aquí estoy sentada despatarrá frente al radiador, quemándome las rodillas y helándome las manos pa coger una Wireless (la de la Universidad, que tengo más derecho).
No sé cuánto tiempo aguantaré antes de contratar un Internet que me permita descargar, pero por ahora pal Messenger me vale.
Por lo demás, este fin de semana han venido mis padres a verme. La verdad que son lo mejor, me han traído el montón de pingos inútiles que les pedí, y les ha sobrado sitio para un montón de cosas mú prácticas pa la vida en un zulo. Es lo que tiene ser padres, que se te activan unos genes mu útiles . Adermás, son las únicas personas con las que puedes ir de polizones en un tren ICE o robar una taza (limpia) de una cafetería, sin que te dé ni pizca de cargo de conciencia.
También he descubierto que en tos laos hay gente apañaísima, y que teniendo prejuicios te pierdes a muchos de ellos. Gracias a todos, y espero poder ir devolviendo los favores y quedar a la altura
Además la fiesta de despedida de Haaren estuvo mu bien, con un montón de comida de sobra y mucho inglés, un par de cajas de cerveza y papas fritas, se pasa uno un buen rato en un periquete.
Ahora colgaré unas fotillos, si esto me deja, que tampoco se pueden pedir milagros.
Un besazo a todos y nos vemos pronto.
Noooo, que mi Marommo es weno (Andrea, te has quedao sin comentario )
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