Si es que un buen fin de semana empieza con una tarde de viernes tiradas en el sofá, bajando a mitad de tarde a por napolitanas de chocolate, y terminando con un domingo de reencuentros después de un año, con raciones en La Latina (cómo no...) y café-robo en Sol con Fnac.
En medio, una noche más en el Bar de los Kikos, pero con más gente, la primera paella de los niños (rica rica!), y que no sea la última... jejeje
Con fines de semana así, cómo no iba a empezar bien la semana ;)
Besicos a todos.
Besicos a todos.
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